Y tú, ¿utilizas aromas concentrados?

La repostería es una parte de la cocina que a todo el mundo le gusta probar y degustar, pero que muy pocos saben los trucos para conseguir deliciosos postres. A la mayoría de las personas que les gusta practicar dicho oficio. Ya sea por entretenimiento o porque se dedican a ello profesionalmente. Buscan la manera de mejorar cada día con el fin de convertir sus platos de repostería en los mejores.

Por ello, utilizan aromas concentrados para la elaboración de sus postres. Hay muchas personas que no conocen los aromas concentrados. Así que, te explicamos para qué se usa, concretamente, y cuáles son sus características.

CARACTERÍSTICAS

La característica principal es que son aromas de alta calidad. Su nombre nos lo revela, ya que tienen una alta concentración de aroma. Por lo que suele venir en pequeños botes de cuatro a diez miligramos, como máximo.

USOS

Suelen usarse para masas de pastelería, como bizcochos, galletas, helados, batidos, chocolates, mazapán, hacer caramelo, buettercream, entre otros. Además, lo podemos utilizar para dar sabor al fondant, ya que por su concentración, no cambia su textura.

DOSIFICACIÓN

La dosificación que debemos llevar, por lo general, es un gramo de aroma concentrado, unas cinco gotas aproximadamente, por cada kilo de masa. La facilidad a la hora de dosificar el producto, es debido al sistema cuentagotas que dispone para aplicarlo.

Desde bioBética queremos mostraros los diferentes usos que tienen los aromas concentrados en la repostería. Además de transmitiros, que los aromas concentrados son los de mayor variedad de sabores podemos encontrar en el mercado, desde los más comunes como la vainilla o la canela, o aromas menos comunes como es el chicle.

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